Ya utilices grasa o vaselina (o cualquier otro lubricante), al contacto con la arena, esta se va a quedar adherida. La suerte, es que aquí te va a entrar poca arena (a no ser que estés continuamente revolcado por la arena con el kayak). Si esto ocurre, lo limpias y repones el lubricante (no hay otra solución).
Aparte de lubricar las guías de los reposapiés, lubrica los ejes de estos (si son pivotantes) y los cordinos, al paso por el interior de los tubos de entrada al casco.
Aquí yo utilicé vaselina y aporté bastante cantidad, buscando el que no entrase por aquí, agua en el interior. El problema no sería el agua, sino el salitre que se iría acumulando y endureciendo el timón progresivamente. A día de hoy y después de mas de ocho años, el timón sigue tan suave como el primer día.
Respecto a la arena, jamás he tenido que limpiar y sustituir el lubricante, pero mi caso, es que los pedales son pivotantes y no deslizantes (y eso es una ventaja).