Hacéis bien. No me canso repetir esa salida a la "Capilla Sixtina" bajo el Cabo Vidias. En verano no se puede ir a San Pedro con la cantidad de banistas, ahora es un embarque ideal, invitando a pasos, islotes y al fin los acantilados del Cabo, es una joya.
Por fin llegó que antes se llamó primavera. Menudo invierno dejamos atrás. En el Cantábrico han pasado ocho temporales casi sin tregua, tres meses en el dique, así de grande es el mono acumulado.
Gozad, estaré con obras en el club. ¡Toca la próxima!