Vaya, no me alegro por vosotros, pero por mi sí, porque me apetecía mucho y tengo esta noche una cena ineludible.
Lástima lo de la luna llena, porque ayer estuve navegando hasta ver salir la luna y volvimos a salir otra vueltecica, ya de noche, porque estaba impresionante. Hubiera repetido con gusto el observar la luna desde Tabarca, mientras brindaba con ron y con María para saldar cuentas pendientes entre piratas.
Abraços