Buenas tardes compañeros, ahi va una crónica.
Resulta que este año he tenido la oportunidad de visitar a mi família política en Chile, pasar las navidades con ellos y después hacer una escapadita hacia el Sur del pais, a la Zona de los Lagos...
Evidentemente, aproveché para realizar varias salidas con kayaks alquilados.
La primera de ellas fue en el lago de Todos Los Santos, con un viento terrible, con un autovaciable. Busqué la orilla que tapava el viento y me mandé una hora de ida y otra de vuelta. Precioso. Los últimos 5 minutos con el viento levantando agua y dandome de lleno en toda la cara fueron memorables. En la orilla me esperava una toalla así que... sin problemas.
La segunda salida ya fue otra historia...
Lago Llanquihue (aprox 40 km de largo x 20km de acho). Me alquilaron un Kayak del año de la catapún, y esta vez no era autovaciable. Mi poquita experiéncia siempre había sido con autovaciables y mi primera impresión fue que resultaba MUY difícil mantener el rumbo. Al salir de la primera bahía el viento soplava lateral y me giraba el kayak una y otra vez, desviándome 90 grados de mi rumbo. A base de palear, exclusivamente de un lado, coneguí ir avanzando durante unos 45 min. Al iniciar el regreso, la história cambió. Ya que además de la dificultad de mantener el rumbo, se le agregó que las olas venían en contra. Acostumbrado a mojarme con el autovaciable y que eso no represente mayor problema no le hice mucho caso a las olas que iban mojandome hasta que a los 5 muinutos, me di cuenta que la cantidad de agua dentro del kayak empezaba a ser considerable, y que este ya no flotaba tan "gracilmente" como antes, sino que empezaba a hundirse hasta la mitad del casco... En dos minutos más empezó a rondarme la idea de que como siguiera así iba a tener que llegar nadando a la orilla y dejar que el kayak se hundiera...
Me puse a remar como loco hacia la orilla más próxima, y el viento me madaba para dentro del lago... Finalmente, con un esfuerzo terrible, consegui llegar a la orilla donde desembarqué y pude achicar agua.
El resto de viaje de vuelta me lo tomé con más calma, sin prisas, siempre cerca de la orilla, y aceptando un poco más el rumbo que me marcaba el viento (zigzagueando). Me las arreglé mejor.
Los siguientes días volví a salir con el mismo kayak, sin adentrarme tanto y tratando de aprender a mantener el rumbo. Me parece dificilísimo. Con mi autovaciale doy una palada fuerte y giro casi 90 grados, y ademas el viento no me da tanto la vuelta... Serà normal?? Serà que el kayak estaba muy cascado??
A mi vuelta a Barcelona voy a intentar probar otros kayaks, ya que mi iodea era comprarme uno "de verdad" más adelante, pero si son tan difíciles de manejar tal vez me quede con mi autovaciable... Ya veremos. Habrà que probar otros...
Lamentablemente las salidas en kayak las hacía solo por lo que no hay fotos, pero os mando una del día que salimos con lanxa para que os hagais una idea del lago Llanquihue con vistas al volcán Osorno.
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