A mí lo que más me ha intrigado al conocer la existencia de este hombre es el origen de su apellido, siendo inuit y teniendo claramente un apellido que, al menos, cuela como castellano.
Paz Padilla, por ejemplo, sin ir más lejos.
¿Habrán llegado los balleneros españoles (muchos vascos iban ahí) a esas tierras en remotas épocas y dejarían su huella de ese modo?
Curioso ¿no?