Xabi, yo tampoco soy un entendido en este asunto (ni he manejado top/gel-coats ni sus pigmentos en la vida), gracias a leer los aportes de otros, que incluso entran en detalles o aclaraciones concretas como ha indicado toniña, me voy haciendo una idea del asunto.
Para verlo fácil es como pensar cuando tienes que pintar una habitación de tu casa, porque la parienta decide que hay que repintar
Si la habitación era blanca y decides, sin más, volver a pintarla blanca, gastarás x kg de pintura.
Puedes estirar bien la pintura, como el fondo es igualmente blanco (aunque esté algo descolorido por el tiempo) tu vista no te permite detectar pequeñas irregularidades en el acabado final.
Por lo tanto, quizá así con dos manos de pintura blanca, la habitación pase el examen visual de la parienta y cualquier mortal.
Pero si decides repintar con otro color ... ya no será igual. A lo mejor dando dos manos, como el caso de antes, y gastando exactamente el mismo peso de pintura (esto es, que la has repartido por igual en las paredes), cualquier persona observará, a poco que se fije, que hay puntitos blancos, pequeños pero visibles y que hacen ver que debería darse más pintura.
Claro, no vas a ir puntito a puntito apañando el repintado. Darás otra capa de pintura, en todas las paredes.
Y eso, una capa de pintura más, pues será una vasta superficie lo que genera que para repintar en otro color hayas gastado x+y kg.
Supón que cada mano es 1 kg para la habitación. En blanco necesitas 2 kg.
Y en otro color podrías necesitar 2 + 0,6 (porque la última mano necesaria no hace falta que llegue al kilo como las manos anteriores) = 2,6 kg
Si lo haces tú, obviamente sigues tu criterio, y tus ganas de trabajar/gastar ... tú decides si con 2 capas llega y ya volverás a pintar cuando sea necesario de nuevo.
Pero si contratas a un profesional y él, según su criterio, también prefiere quedarse en 2 manos con lo que se ahorra y gana, aunque a la vista en detalle cualquiera (incluso tú que le pagas) vea tales motitas del color anterior, algo le harás observar ¿no?
-Oye, paisano, que se ve el color de antes. Dale otra mano hombre
Un profesional no debería llegar a ese punto, esto es, que un cliente le haga ver que no ha hecho su trabajo a la perfección.
En fin, como dice Javier ... y nunca mejor dicho dado el tema: Para gustos los colores.
Si uno quiere un color a elegir entre tres, por ejemplo, rojo, naranja o amarillo ... y le preocupa mucho el tema del peso final, pues bueno, sería cosa de hablarlo con el fabricante.
Pero no por eso lo va a pedir blanco, si es que así no le gusta o tiene cualquier otra pega.
O al contrario
Estéticamente me gusta un kayak todo del mismo color, cubierta y casco igual. Hay la opción más usual, al menos en fibra, con casco en blanco y cubierta en cualquier otro color.
También es verdad que se ven mezclas atractivas, incluso variando entre colores en la misma cubierta, o el mismo casco también, y haciendo algún tipo de dibujos, diseños o elaboraciones estéticas personales (ejemplo, el de Xema).
Si en su momento no leyera esta curiosidad por parte de Javier, nunca me plantearía la influencia del color elegido en el peso final del kayak.
¿Que ahora me la planteo en el caso de un próximo kayak? Pues tampoco, la verdad, pero es un dato el cual, sí, conozco ahora.
Si hay un próximo kayak, quién sabe, si lo puedo personalizar quizá quiera buscar la perfección (personal) a ese respecto, pero si el elegido ya está hecho y personalizarlo ya sería una inversión más, seguramente me sirva tal cual venga.