He visto el reportaje. Me ha dejado un nudo en el estómago. Realmente es muy difícil imaginar su esfuerzo, su cansancio, esas noches metido dentro del kayak, todo el tiempo mojado y helado, para acabar muriendo a tan solo unas pocas millas de su destino, tras remar casi 2000 km. Y todo porque le falló el anclaje de la 'burbuja' al kayak.
Lo siento mucho por él, su mujer y su hijo.
No lo conocía. Pero de veras lo siento.