No creo, pero efectivamente, y así la he llevado toda la mañana y, me dado cuenta en el agua, pero con lo mal que me encontraba he sido incapaz de darle la vuelta, como tendría los tendones que cuando he nllegado a la orilla no podía levantar el culo del asiento con los brazos, si no esta mi hijo creo que me habría volcado. La verdad nunca me había parado en el detalle, siempre le he dad o la vuelta a las palas, ni se me pasaba por la cabeza que pudiera darme tendinitis.