Javier:
Me parece muy interesante el uso de imanes, ya que además de reducir en duración y esfuerzo el montaje, seguro que alargan la vida de los mecanismos de unión.
Sin imanes ejerciendo tracción de una pieza sobre otra al acercarlas, es el montador el que tiene que aproximar cada pieza y hacer movimientos tanto de unión de éstas (digamos movimientos horizontales entre piezas, que es el que facilitan los imanes) como de encaje (arriba-abajo y derecha-izquierda) antes y durante el momento de apriete de las tuercas.
Hay que tener en cuenta que el montaje se va a realizar sobre arena, cemento, campo u otras superficies no necesariamente niveladas. Así que no es descartable que las piezas encajen a simple vista pero que se muevan o desvíen de su alineación correcta durante el apriete sin que el que las monta lo note. Esto podría ocasionar algún daño en los elementos de unión o en el casco.
Salvo por el problema que representa para las tarjetas de crédito y otros aparatos electrónicos y magnéticos (lo de la brújula es una cabritada), opino que es un elemento muy bien pensado en este cuidado diseño de corte, que posibilita el montaje por una sola persona.
Mis felicitaciones de nuevo, Javier.
Rafa