Quiero dar las gracias a Marco y a Fernando por la estupenda iniciación a las "sensaciones del Cantábrico" que he vivido hoy.
Son sensaciones fuertes (es mi primera salida a mar abierto), impresiona al principio, pero cuando vas cogiendo confianza al ver la nobleza con la que te mecen las olas del mar de fondo, que te permite algunos errores, pero a la vez te advierte de ellos, y te dice "no te pases y controla" que yo siempre hago lo que me apetece, junto con mi amigo el viento; disfrutas como un enano al ver que eres capaz de integrarte en un medio nuevo y desconocido para tí.
Espero repetir esas sensaciones que seguro que serán otras nuevas cada vez que abandone la tierra para "flotar" en el mar.
En fin, gracias de nuevo, disculpad mis temores y agobios, y que disfrutemos de muchas mas travesías; y a ver si se anima mas gente, que merece la pena. El Cantábrico nos da su permiso para navegarlo.