Lo normal es llevar un cabo de 10 - 15 metros que flote:
En una punta va unido a tí con un cinturón de safado fácil (de esos de lastre para el submarinista) por si lo tienes que abandonar urgentemente (entrada en playa, rompiente,...).
En la otra punta lleva un pequeño flotador para soportar, en caso de lanzar a distancia, un mosquetón simple (no de seguridad) de boca ancha y sin muelle (por la salitre) y pensando que no somos Jhon Way (o como se diga) y no lo recoja el remolcado.
En la piragua que remolca, el remolque va a la pesona (a la cintura para bajar el centro de gravedad) y no al barco, por ello muchas veces, en el cabo de remolque, lleva una pequeña goma tensora para disminuir los tirones que pegan ambas piraguas surfeando olas, por el viento,... y hacer más conformtable la dura tarea de remolcar. En la piragua remolcada va lo más a proa posible (el asa de transporte tiene que estar pensada para ese tipo de remolques sinó no es un kayak de mar) ya que sino es casi imposible dirigir la proa remolcada en la dirección deseada, sin que el kayakista haga un esfuerzo de cintura importante. Es bueno que el tope del asa de transporte de proa salga por fuera de la línea máxima de proa (del casco) para que el remolque no rasque la piragua con el rozamiento.
Algunas marcas ya tienen cabos de remolque preparados como Prijon y son prácticos y bonitos, pero todo va en lo manitas que somos cada uno (yo soy un desastre y se me da mejor romper que arreglar ja ja ja)
Un saludo
Musgo