Hola, al final la cosa nos salió muy bien.
Habíamos quedado a las 9:00h en la Escuela de Piraguismo de San Javier, con la intención de salir sobre las 9:30h. La cosa se retrasó un poco y partimos unos 15 kayaks en dirección a la Encañizada del Mar Menor.
Entre el grupo salió a navegar gente con poca experiencia con el kayak de mar, pero hicimos un grupo compacto y el ritmo que llevábamos era muy cómodo. El mar estaba muy tranquilo, con una pequeña ola que poco a poco fue desapareciendo conforme nos acercábamos a los arenales.
Al principio unas nubes nos hicieron dudar si la luna de dejaría ver, pero brilló en la mayor parte de la travesía con mucha intensidad y no tuvimos apenas que encender los " leds " en todo el trayecto.
Pasada una hora de paleo, nos adentramos en las aguas duras de los Arenales de La Encañizada, nuestros cascos acariciaban suavemente el fondo marino a causa de su excasa profundidad y más que palear lo que hacíamos en algunos momentos era cavar en la arena.
Poco fuimos llegando a una pequeña isla en donde se ubica la antigua casa de la Encañizada, un lugar que de noche es bastante tenebroso y esto dio pie a las consiguientes bromas ( las cuales los que somos un poco caguetas agradecemos, por la cosa de romper el hielo porque en realidad da bastante " yuyu " estar allí ).
Desembarcamos a las 23:00h y miré la luna unos instantes y tras unas bromas nos dispusimos a dar cuenta de bocatas y refrescos, hubo muchas risas, muchos chistes y también visitamos el interior de las plantas de la casa abandonada.
La noche era perfecta y se estaba muy bien con tanta tranquilidad, apenas a lo lejos se escuchaba el alboroto de la costa repleta de coches, bares de copas, gente, las atracciones de la feria, …, lo que nos chocó un poco fue que se oyese el canto de las gaviotas y flamencos a esas horas, puede ser porque por momentos parecía que estuviese amaneciendo a causa de la fuerte luz de la luna.
Algunos de los participantes tenían que trabajar el sábado temprano y pronto partimos de regreso en dirección a Santiago de La Ribera.
El ritmo siguió alegre y a partir de la mitad del camino, se levantó una pequeña ola a causa del viento de tierra, que nos ayudaba un poco con pequeñas surfeadas.
Cuando llegamos recogimos los kayaks y nos despedimos hasta la siguiente.
Yo opté por volver a Lo Pagán junto con mi primo Paco costeando, pasando por entre los barcos, balnearios y pantalanes.
El trayecto se nos hizo muy corto y cuando nos aproximamos a Lo Pagán, pudimos comprobar el " follón " que había allí montado, desembarcamos, metimos los kayaks en mi cochera y nos despedimos.
Mi primo me dijo que se lo había pasado de ensueño porque no había salido en ninguna travesía nocturna y le gustó mucho.
Esta travesía nos ha servido de toma de contacto para la que vamos a realizar en agosto, que en esa si que se lía la cosa, je, je … barbacoa con lomicos, salchi, longa, toci, chori, pan de carrasca, cerve fría, licores, hielo y copas, harán las delicias de todos, gracias a todos por participar y un saludo.
NOTA. No tengo ni una foto, porque terminé de trabajar tarde y recogí las cosas con prisas, cuando me llevé la cámara no me di cuenta de que no tenía la batería metida y que RosaSkua me la estaba cargando, en fin … para la siguiente espero no fallar con el tema multimedia.
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