Se me olvidó advertir que la foto de la ruta, no refleja el nivel de agua actual ya que hay muchísima más agua de la que aparece río arriba.
Y también me acordé de que en Portomarín se puede paladear la más exquisita empanada de anguilas.
antooni: a lo mejor tus buenos recuerdos se deben a que cumpliste con la tradición de que los peregrinos que siguen su camino, toman pan mojado en aguardiente y azúcar, lo que se llama la "parva". Por experiencia se que la salida de Portomarín, subiendo por frondosos bosques de especies autóctonas, se afronta de otra manera, más "positivamente" si cabe que otras subidas...
Saludos,
Rafa