Tal como yo lo veo no deja de ser un chaleco de supervivencia, con 100N de flotación, recogido dentro de una riñonera mientras no va activo.
Claro, mientras no va activo es poco aparatoso. Pero cuando lo activas -que luego de hincharse debes colocártelo -verás que te vuelves como el muñeco de Michelín

Tendrás menos maniobrabilidad para reembarcar en un kayak cerrado, por ejemplo.
Supongo que en uno abierto o cualquier tipo de tabla será más fácil.
¿Y después de activarlo y ya sobre el kayak que harás? ¿Palear con él tal cual va o lo desinflas? Si haces lo segundo y vuelves a volcar, ¿te llevas otro cartucho de repuesto o todo a pulmón?
Bueno, cada uno ha de pensar lo que hace y si cierto equipo le sirve o no. Por ejemplo, en salidas tranquilas donde haya poca probabilidad de volcar puede ser una solución de seguridad pasiva (la tienes y la activas cuando sea necesario) amén de ofrecerte esa comodidad o falta de aparatosidad de los convencionales.
Para este caso ya hay los mismos chalecos pero sujetos a nuestro torso, es como llevar un par de cintas sobre tu cuello y pecho, teniendo la ventaja de ya ir colocado (cuando lo activas y se infla ya lo tienes donde lo tienes que colocar, no como el que muestras que hay que ponérselo luego)