Esta tarde (1540h) RasKebdana y yo nos hicimos a la mar incluso antes de que ElPane llegase. Como había un levante que aplastaba con mar de fondo notable, pusimos proa hacia Cabo Tres Forcas, nada mas salir el reflujo existente en las cercanias del rompeolas, nos movía peor que las olas cuando el viento sopla del oeste (poniente). A 1705h RasKebdana dijo que tenía un ''rendez-vous'' y lo mejor sería volver, por lo que me dirigí directamente rumbo a Melilla ........ Hasta aquí , haciendo brazo, silencio en la remada, ElPane acusando dolor en el hombro izquierdo y algún chiste/comentario ... DE REPENTE,

, SI, tiros. Giramos la cabeza a estribor ¡Dios mio! , estamos a la altura del campo de tiro ..... ¡bueno, no pasa nada! , al fin y al cabo no es la primera vez .... (pero acojona) ...... unos veinte segundos mas tardes ya habíamos visto las banderas que avisan de ejercicios de tiro con fuego real ........ ¡Estamos muy lejos! .... ¡qué va a pasar! .......
......UNA VEZ MÁS pero con mayor intensidad se mezclaban los

con otro

ratatatatatá MÁS GORDO .... más tiros, ahora se mezclaban los disparos de fusil con los de ametralladora (el tableteo inconfundible) y a continuación e imposible de identificar su procedencia aunque si el silbido propio de película y cuando haciamos tiro en la mili, las balas silbaban por nuestras cabezas ....
¡Qué máquina! , ¡Qué torpedo! ¡Qué velocidad! ..... Durante mas de 5 minutos, la velocidad que cogimos fue de vértigo, el miedo nos hacía palear a los tres agachados hacia adelante. Al mismo tiempo la adrenalina nos daba ese ''punch'' para seguir aplicando la misma intensidad de fuerza durante mas tiempo ......
Cuando consideramos que estábamos fuera de peligro , nos relajamos y os puedo asegurar que la distancia que nos quedaba hasta Melilla, tuvimos risas y comentarios que hicieron agradable y menos tedioso el último tramo.
Nunca se me podía haber ocurrido invitar a remar a alguien en Melilla, para que experimente el sonido de las balas tan cerca de si, que lo único audible con intensidad sea el sonido de su corazon encerrado en una caja con eco.