Vamos a ver: lo cortés no quita lo valiente.
Es cierto que las leyes las hacen quienes las hacen. Es cierto que algunos abogados y abogadas aconsejan a sus clientas declarar malos tratos para favorecer sus pretensiones. Es cierto que algunas mujeres realizan ese tipo de acusaciones para ejercer una fuerza sobre sus compañeros indeseados (que no necesariamente han de ser indeseables). Pero lo que es cierto es que existen las muertes por apalizamientos ejercidos por los varones sobre las compañeras, mujeres, meretrices o como narices queráis llamarlas.
Que una tendencia, pretensión, o política sea injusta no hace justa la violencia. Ni la ejercida entre conyuges, ni la ejercida entre compañeros, ni la ejercida por la policia, ni la ejercida por la incompetencia de algunos jueces y políticos.
Este hilo tenía como objeto señalar un día, y denunciar una situación. Siempre habrá quien trate de arrimar el ascua a su sardina, pero la realidad diaría la veo donde trabajo. Y no puedo decir que no esté justificada la denuncia de esta situación, cuando diariamente mujeres (y hombres en menor medida) son violentadas por la acción de sus compañeros. Eso es lo que he tratado de denunciar. Sin mas.
Soy varón, y también vivo esa especie de persecución maníaca por el macho que algunas posturas políticas han justificado. Nunca he levantado la mano contra una mujer (a veces con un exceso de autocontrol, todo hay que decirlo), y a veces si la he levantado contra un hombre que agrede a una mujer, con la consecuencia de denuncia hacia mi persona por parte de la mujer agredida

. Que algunas personas seamos estúpidas, no quiere decir que la estupidez haya de ser generalizada a la totalidad de los seres humanos. Pero el y la que la hace, debe pagarla.
No me declaro feminista, pero si considero que debemos llegar a una igualdad consensuada. Y lo que siempre denunciaré es la violencia, de uno o de otro lado. Por supuesto que ciertas "hembristas" (vocablo concebido por uno de mis profesores), tratan de ejercer otro tipo de violencia generando la imputabilidad de machismo violento a los varones, pero no son menos que los misóginos que han considerado (y consideran) a la mujer en otro estrato al de los hombres. Creo que el alejamiento de ambas posturas es aconsejable y propedeútico.
Por último, y pese a toda la explicación anterior, es responsabilidad de los políticos, pero también de toda la sociedad, lograr que la violencia contra la mujer (en este específico caso) desaparezca. Es mi opinión, y como opinión, personal y por ello subjetiva.
Por cierto, este tipo de conductas, no las he notado entre quienes hacemos kayak, por lo menos entre los y las compañeras y compañeros (esto de escribir para todo el mundo me hace añorar el latín), que conozco; por algo será.