POR FIN!!!
Después de varios intentos fallidos, he podido estrenar el kayak. Según el pronóstico del tiempo hoy iba a ser el único día de la semana con vientos de menos de fuerza 5-6. Así que, disparados, nos fuimos Pepin y yo a la boca del río.

El Cabo de Gata al fondo

Una vista de la planta del kayak

Esto es la primera vez que me sale

sin repalear ni ná, y supongo que el mérito es más del kayak que mio.

Pepín también se lo puso...

La foto no es de calidad porque es una captura de video.
Casi se me olvida, la horchata...

¡Que decir! Pues que el kayak cumple con todas mis expectativas

mantiene el rumbo muy bien, y cuando cantea gira rápido.
A pesar de la manga que tiene no es nervioso, aunque tampoco es para novatos. Y es bastante rápido, pero eso, que lo comente Pepín.