
Juas, juas, recuerdo a ese abogado De Vito, o al de los Simpson, o al de breaking bad, se ve que allí es un personaje estandar.
Por otro lado , nunca pasa nada hasta que pasa, y entonces te das cuen de a quien has elegido como compañeros, o te han dejado solo, o te reclaman más atención, aunque lo normal es que la gente te eche una mano o sea indulgente con tus limitaciones.
Aún así la mente humana y su comportamiento es imprevisible. De las quedadas de mi zona, guardo grandes recuerdos e imágenes de compañerismo, aunque ocasiones hubo en alguna fenicia o alguna del Giñoso en que las cosas se pusieron difíciles de verdad, al menos para mi, que soy de los torpes. En esos momentos, todos con el ojete apretao, viene el desperdigue y el esturreo unos arrimandose a otros por si hacen falta, otros arrimandose a unos por si les hace falta, la mayoría con visión túnel, vigilando la ola, la pared, la playa de destino y su propia proa, prometiendo no volver.
Luego, cuando estas en el saco, piensas, joé que bien lo he pasado y que buenos son todos, y contando los días para la próxima.
Era un poco como cuando dabas un paso con seguros que sabias que no aguantarían..
En esos momentos es cuando piensas que las exenciones de responsabilidad son conceptos de otro mundo, que tu estas allí para ayudar o que te ayuden, sin más cálculos ni estrategias.
Pero claro el lunes vuelves a tu mundo y si pasó algo, lo ves de otro modo.
Nos deberíamos haber quedado en el siglo 10.