Hola, estoy contigo Capitán Barbosa y … pues oye que todavía no tengo claro lo del juego de la linterna abierta o cerrada, porque me explicasteis que el truco estaba en la posición de las piernas ¿ no?, pero … es que yo me estaba fijando en todo y puedo casi asegurar que las piernas no las movíais todos, porque cuando se atrancó la cosa tres veces seguidas en mi turno y el de mi izquierda me la pasaba cerrada, yo la tenía que pasar cerrada al de mi derecha y si que ya he pillado que estaba haciendo un poco el “ lelo “, cuando al recogerla cerrada, se la pasaba con mucho cuidado al de mi derecha para que no se abriese, pero EL DE MI IZQUIERDA NO MOVÍA LAS PIERNAS, con lo cual, todavía no se si es verdad que lo de abierto y cerrado era al compás de las piernas o era mentira para liarme más todavía y el juego en sí no tenía sentido ninguno ( algo de lo que estoy convencido ), de todas maneras me lo pasé en grande, aunque me quedo con bastantes dudas.
Sigo …
Nota. Si alguien está esperando que al final ponga fotos y vídeos, tengo que decir que no llevaba la cámara, porque se la tuve que dejar a RosaSkua.
Sigo …, a la mañana siguiente nos levantamos, nos reímos, desayunamos, nos reímos, recogimos las tiendas y cargamos de nuevo los kayaks y tras reírnos, partimos rodeando la isla Perdiguera, en dirección al camping del Mar Menor, que está situado en la zona de la Base Aérea de San Javier.
El ritmo de paleo era alegre y en una hora escasa nos encontrábamos en las inmediaciones del camping.
Una vez allí, estuvimos jugando un poco con los kayaks, los unos probaron los de los otros y los que continuábamos hacia Lo Pagán partimos de nuevo.
Estuvimos costeando por la zona de la Base Militar, observamos los aviones de la Patrulla Águila, navegamos por los carrizos, vimos varias clases de aves acuáticas, pasamos por debajo de pantalanes, hicimos alguna paradilla y en media hora estábamos en las inmediaciones de la Escuela de Piraguismo de Alex.
Allí paramos un ratillo para mear y eso, je, jeeee, ¡¡ que guay !!, ( me río, porque nos reímos mucho los dos días ) y seguimos paleando por la costa, pasando por Santiago de la Ribera, la Ciudad del Aire, hasta llegar de nuevo a Lo Pagán.
Una vez allí, cada uno recogimos las cosas y fue cuando llamé a “ mi princesa “ y no me quedó otra, que irme a comer con mi familia a casa de mi suegra, en vez de irme con los Nooks, a terminar de comernos la carne que sobró de la barbacoa de la noche anterior.
Me ha gustado mucho pasar el fin de semana con todos vosotros, me ha encantado volver a ver a los conocidos y haber conocido a los que no conocía. Siempre lo paso muy bien en todas las travesías a las que puedo acudir, pero me llevo muchas sensaciones intensas de este fin de semana, momento únicos en compañía que no puedo explicar, son cosas que se queda uno y que son muy bonitas.
Hoy me estoy hinchando a teléfono, a papeles, a facturas, a rollos, pero sabéis que … que de vez en cuando, cierro un poco los ojos y me veo saltando las olas junto a Bacalao y a Josemikey, ( menuda pareja de palistas experimentados, dos pozos de sabiduría, buen humor y simpatía, me habéis calado hondo tíos ), y casi siento el agua mojándome la cara, las capas de salitre secándose en los cristales de mis gafas, los labios salados, las gaviotas expulsándonos de las islas con sus vuelos rasantes y con un gran suspiro me acuerdo de todo lo sucedido.
Gracias de veras por haberme hecho pasar un fin de semana tan guaperas.
Un saludo.