Lo que pasa es que después de una sesión de paleo, se nota al tacto que por los lados los listones de haya sobresalen un poco de la pértiga, muy poco, a lo mejor 0,2 mm.
Cuando se seca bien, en un par de días, quedan completamente enrasados con la pértiga, esta secuencia de movimientos relativos entre el haya y el cedro puede hacer que acabe fallando el adhesivo.
Por eso decía que creo que es mejor buscar maderas que tengan un comportamiento parecido frente a la humedad.
En cuanto al aceite, la verdad es que protege, pero tampoco tanto, al fin y al cabo deja el poro de la madera abierto.
Para comprobar lo que digo se puede hacer un experimento interesante, te propongo lo siguiente:
Coge una pala bien seca, que no haya probado el agua en 15 días, y con un pie de rey mide su ancho afinando hasta la décima de milímetro.
Después, utilízala en una travesía de unas cuantas horas y vuelve a medir el ancho de la hoja.
Según la madera de que esté hecha, la variación de anchura de la hoja, puede variar de una décima de milímetro hasta un milímetro
