Artículo publicado en
www.elcomerciodigital.com (periódico local)
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Asturias
«La costa asturiana ha podido con nosotros»
Los cuatro piragüistas rescatados de entre la niebla el miércoles en Luarca están recorriendo todo el litoral español en kayak. En julio reemprenderán su aventura en el Cantábrico
ISABEL GÓMEZ/LUARCA
NÁUFRAGOS. Haitz, Enrique, Alejandro y José, ayer frente a la Cruz Roja de Luarca. / I. GONZÁLEZ
La costa asturiana ha podido con ellos. Tras recorrer en piragua distintos puntos del litoral español sin ninguna incidencia, la niebla que estos días ha cubierto la región ha truncado su travesía y les ha impedido cumplir una meta que ellos, por amor a este deporte, se habían fijado: de Ribadeo a Llanes a golpe de pala.
Alejandro, José, Enrique y Haitz son cuatro amigos, «unidos por el kayak», que se embarcaron hace unos días en la aventura de conocer los secretos que ocultan las playas asturianas. El martes partieron de Ribadeo (Lugo) rumbo a Tapia de Casariego, donde hicieron escala y desde donde salieron al día siguiente con la intención de cruzar la costa valdesana. Pero las dificultades derivadas de la espesa niebla y una avería en su GPS les obligaron a pedir auxilio a Salvamento Marítimo. Fueron rescatados el miércoles, sobre las 18.20 horas, a la altura de Cabo Busto, con síntomas de hipotermia. Y así acaba su aventura. Al menos la deportiva.
Tras el susto, las malas previsiones meteorológicas anunciadas hasta el domingo, la pérdida de un remo y una tendinitis se han visto obligados a abandonar la travesía. Pero no pierden la sonrisa: «Hacemos lectura de lo que nos ha pasado y hemos decidido que nos dedicamos al turismo de interior». No es lo mismo, pero no es una mala opción, opinan. De hecho, ayer, tras pasar la noche en las instalaciones de Cruz Roja en Luarca, cogieron un coche y prosiguieron su camino hacia el este, donde esperan encontrar grandes espacios naturales y «buenas fabes».
No obstante, no se rinden y prometen que en julio volverán a intentarlo, cuando puedan volver a compaginar sus periodos vacacionales. Entonces esperan contar con la seguridad de que el tiempo y las mareas serán mucho más favorables para realizar sus planes.
Y es que se proponen recorrer toda la costa española en piragua, «aunque por tramos» y visitando sólo aquellos puntos que les ofrecen naturaleza en estado puro: «Por ejemplo, no recorrimos el sur de Baleares porque es lo más turístico», explicaron de una de sus anteriores aventuras. Hasta ahora, han navegado por las costas de Cataluña, Baleares, País Vasco y Cantabria. El único incidente y las peores condiciones se las han encontrado en Asturias.
Amigos por el remo
Sólo Enrique tiene un pasado como profesional del piragüismo. Sus compañeros de expedición son «apasionados» de este deporte, en el que han invertido mucho tiempo y dinero. Pero sostienen que esta actividad es una gran oportunidad para «conocer magníficos lugares nuevos y gente que, si no fuera por la piragua, no conoceríamos». Ellos son un claro ejemplo de que tal vez tengan razón, porque son de comunidades distantes (País Vasco, Madrid y Murcia) y, según señalaron, tienen profesiones muy dispares.
En este caso, por suerte o por desgracia, sólo eran cuatro. Pero en la travesía que realizaron el pasado verano, junto a la costa cantábrica, «éramos trece personas, muy diferentes entre nosotros».
Ahora se han visto obligados a hacer un alto en el camino. Pero la costa peninsular seguirá estando ahí para ellos. Porque la naturaleza que ofrecen los rincones costeros, más allá de los que se llenan de turistas en los meses de julio y agosto, «sólo se conocen si vas en piragua: cuevas, entrantes, calas escondidas», desvelan estos cuatro amigos.
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