Sí, lo que pasa es que a la peña que navega en veleros de recreo haciendo travesía le van aquitar las ganas. A los que lo tienen como afición y centran sus esfuerzos económicos en mantener un velero a flote para salir los findes de semana y las vacaciones. Sólo para hacerse una idea, la revisión de la balsa neumática de salvamento que tienen que llevar obligatoriamente si van a alejarse más de 12 millas de su puerto de origen ya les cuesta de 400 € hacia arriba anualmente, según donde la realicen.
Sí, van a ir segurísimos, pero sólo la peña para la que no supone ningún esfuerzo gastarsse ese dinero va a poder permitírselo, esto es, los que no navegan casi nunca porque están ocupadísimos.
Así llegamos a la paradoja de los coches modernos:
valor del coche: 12.000 € nuevo
te das un golpe y la chapa del coche, los ejes de rodadura y el chasis por ese orden actúan de fusible amortiguando los efectos sobre los ocupantes, saltan los pretensores pirotécnicos de los cinturones, los airbags destrozan salpicadero y tapicería, los ocupantes salen ilesos y la reparación cuesta 4.000 €
¡pero has salido ileso!
¡pero mehe quedado sin coche porque si es culpa mía no tengo dinero para repararlo!
¡y además el valor del coche antes del golpe era menor de esa cantidad!
me imagino que esas radiobalizas son de un solo uso y una vez enchufadas no se pueden desenchufar, si se te caen una vez al agua se dispararan y tendras como minimo que gastarte una pasta praponerlas opertaivas de nuevo sino comprar otras, por no hablar de revisiones o cambios de baterías (sí, cada siete años), con lo que, si se te cae al agua, no podrás navegar en regla hasta que te gastes otra vez ese pastón en la radiobaliza
osea, que vamos a tener una seguridad tremenda porque no podrás permitirte navegar da la pasta en que se está poniendo todo
y no me voy a meter con lo que nos cuesta que una persona coja un avión cumpliendo todas las normas de seguridad actuale sy las que vienen, según las cuales, nos van poco menos que a abrir ficha policial en elmomento en que cojas una vión, huellas dactilares y ADN incluido
¡que desahogo y menudo tostón!
son solo reflexiones que quería compartir por si alguien tenía la percepción de que con tanta seguridad no se va a poder ni comer palomitas sin carnet de manipualdor de alimentos