El invento mola mucho. pero como todo, tiene sus ventajas e inconvenientes.
En alguna travesía larga sin tomar tierra, paramos a relajarnos y picar algo, y a mí me gusta estirar las piernas en el hueco que queda entre los reposapiés a la vez que me tumbo hacia atrás. Con el tabique fijo esto se impediría.
Aunque no cabe duda que no iré en esa postura perfecta del paleo de pista con las piernas bien centradas, aún así a veces junto las rodillas separándolas de las musleras, pero con los pies un poco abiertos claro, con lo que se pierde empuje y no es lo mismo.
Sí es interesante que a poder ser el fabricante te pudiera poner el tabique de fábrica un poco acercado a tu medida para no tener que poner múltiples capas de foam si es que tenemos pensado hacer este brico cuando compras el kayak. Algunos están diseñados para gigantes y desde el reposapiés al tabique hay un enorme espacio vacío, que sólo sirve para llenarse de agua en caso de caída, o para llevar el garrafón de agua en largas travesías.
Deberíamos ir al "sastre de kayaks"a medida para cada uno.
Pero eso sólo pasa en Groenlandia.

Bueno, y puede que también en Aranda de Duero, quién sabe
