Amigos de la pala tradicional, id preparando un hueco en el garaje, en el club, o en el lugar donde guardéis vuestros kayaks. Creo que el nuevo kayak de Fun Run es el acompañante perfecto para la pala groenlandesa. Un juguete. Un capricho que más de uno se dará. No lo dudo.
¿Os imagináis un kayak de 4,60 metros de eslora, 50 cm. de manga, con la cubierta bajita?
¿Un kayak de fibra con línea esquimal?
¿Un kayak para jugar?
Creo que Fun Run ha conseguido crear un “Qajaq” de fibra para los que disfruten con la pala esquimal, con los esquimotajes, apoyos, Sculling, etc.
El SPARTAN 4.6 es, a falta de probar en el mar, un kayak muy noble, en todos los aspectos.
De la línea no voy a decir gran cosa ya que no sabría añadir algo que pueda complementar a una foto. ¿Preciosa tal vez?
Un kayak ligero pero con gran resistencia gracias a un nuevo material empleado en su construcción, del que ya nos dará cuenta Javier DLP.
Sus 50 cm. de manga te transmiten, a primera vista, una sensación de “mambo incontrolable” que, una vez sentado en su nuevo asiento, desaparece por completo. El Spartan tiene una estabilidad primaria increíble. Parece mentira que tan pocos centímetros permitan semejante estabilidad.
La secundaria no le tiene nada que envidiar a la primaria. Da la sensación de avisarte cuando te acercas al límite. Se puede cantear perfectamente sin ningún tipo de miedo a volcar.
Gracias a su popa aquillada mantiene sin ningún problema la dirección. Cualquiera sería capaz de llevarlo recto sin problema.
Las correcciones de dirección se realizan mediante un ligero canteo. En caso de querer girar, con una mayor inclinación, admitida sin problema, se puede girar el SPARTAN casi en el sitio.
El nuevo asiento me resultó muy cómodo, al igual que el respaldo.
Fácil de calzar ya que la cubierta es bajita (no se la medida, Javier??????)
Se me olvidaba, facilísimo de esquimotear. Hice tres o cuatro eskimos, pero no los disfruté demasiado ya que el agua del Duero estaba fría de cojo*es. Pero me dio la sensación de poder hacer muchas cosas con el que con otro tipo de kayak serían, cuanto menos complicadas de conseguir. Una pena la temperatura del agua. Me hubiese gustado mucho mojarme más, pero en el poco tiempo que estuve con la cabeza en el agua, me entró un dolor de cullónsssss.
La próxima vez que vea a Jesus con su gorrito de neopreno no me hará gracia. Solo pensaré: Este tío si que sabe. Jejeje
Antes de terminar, decir que el Spartan 4.6 de las fotos es el básico, Roll & Play creo, enfocado a jugar, pero también existe la posibilidad de equiparlo con lineas de vida, tambuchos, etc.
Agradecer a Javier el permitirme probar este maravilloso kayak, al igual que el nuevo Draken del que ya os hablaré, y darle las gracias, de nuevo, por su hospitalidad.
Alguna foto en el agua
