… así estaba poniéndose la cosa y aunque en el Mar Menor la ola no se levanta mucho a pesar del fuerte viento, las rachas eran muy fuertes y se paleaba con dificultad …

Me despedí de los pescadores y me fui a la Encañizada a probar suerte con las gambas peladas que llevaba como carnada.
Con dificultad llegué a un lugar en donde abundan las doradas y probé suerte con la pesca. Pronto obtuve resultados y al cabo de poco más de una hora ( no podía quedarme más tiempo, porque tenía un bautizo esa misma mañana ) obtuve unas doradas, unas chapas y una lubina de menos de ½ kilo.
Salí paleando fuerte con el viento en contra en dirección a la escuela de Alex. El Creus navega de cine en todas las condiciones y pronto pude reconocer ( a pesar del salitre en las gafas ) el edificio de la escuela de piraguismo.
Cuando llegué el mar estaba “ plato “ gracias a la protección que ofrecía su orientación, en la arena ha había muchas piraguas y palistas compitiendo en las diferentes pruebas que se estaban celebrando.




La Escuela de Piraguismo de San Javier está en un lugar privilegiado a orillas del Mar Menor y durante todo el año se pueden practicar piraguismo, kayak de mar, etc …

Sin perder ni un minuto entregué la pesca a los responsables en las oficinas y tras recoger rápido todas las cosas, me fui para mi pueblo en donde tenía todavía que llegar, descargar y arreglarme para un bautizo que tenía esa misma mañana.
Sobre las 19:00h llamé para ver como había ido todo en las pruebas y por si había ganado algo y ¡¡ siiiiiiiiiiiiii ¡!, ja, ja, ¡¡ mi primera copa en un concurse de pescaaaaa !!, ¡¡ quedé el primeroooooo !!.
La verdad es que quedé el primero y el último a la vez porque tan sólo participé yo, je, je, pero lo hice con mucha ilusión que es lo más importante, ja, ja, venga … nos vemos en la siguiente, un saludo.