ba a subirme al kayak y en la playa había un chico en la orilla intentando palear un poco con el suyo, pero volcaba nada más subirse.
Como me supuso con experiencia me dijo: "oye mírame esta piragua a ver que te parece, que sólo vuelco....."
y me acerqué. Era una kayak artesanal, con forma de kayak de iniciación, entre pista y uno de mar pero sin tambuchos.
Se veía artesanal porque era muy grueso y pesado, que es cómo los hacemos los que no sabemos, que metemos material a morir por si acaso, pero el acabado general y de pintura estaba realmente bien.
Pruebo el barco y me caigo en redondo al mar. Segundo intento y volando al suelo.
Creo que va a ser del asiento, le dije. Deberías quitarlo.....
Y es que no le les había ocurrido otra cosa
que cojer una silla de cafetería, de las de plástico de la terraza, serrarle las patas y plantarlo con respaldo y todo el medio de la bañera.Cuando volví de navegar, estaba ya con el barco sin asiento e incluso lo probé y navegaba muy bien, pero lástima de foto, porque ver un kayak con una silla de bar, no tiene precio.
